Si alguna vez te has mirado al espejo y has notado un brote, probablemente lo hayas llamado “acné” o simplemente un “grano”. Pero ¿sabías que esos dos términos no significan exactamente lo mismo? Es fácil confundirlos, pero hay una diferencia clave. Vamos a explicarlo de forma sencilla para que puedas entender mejor tu piel y cómo cuidarla.
¿Qué es el acné?
Piensa en el acné como el panorama general. Es una afección de la piel, una que causa una mezcla de puntos negros, puntos blancos, granos e incluso bultos más profundos bajo la piel. Es más común durante la adolescencia, pero los adultos también pueden tenerlo.
El acné ocurre cuando:
- Tu piel produce demasiado aceite (sebo),
- Las células muertas de la piel obstruyen los poros,
- Las bacterias se acumulan en esos poros obstruidos,
- Y la piel se inflama como resultado.
Todo esto puede provocar brotes, no solo en la cara, sino también en la espalda, el pecho o los hombros
¿Qué son los granos?
Los granos son una manifestación visible del acné. Son esos bultos rojos o con pus que casi todos hemos tenido en algún momento. También se les llama espinillas, barros o simplemente brotes.
Hay varios tipos:
- Pápulas – pequeños bultos rojos que suelen doler
- Pústulas – los que tienen una cabeza blanca o amarilla
- Quistes o nódulos – bultos grandes y dolorosos bajo la piel
En resumen, los granos son uno de los signos del acné.
¿Cómo están relacionados?
Podemos decirlo así:
El acné es la afección, y los granos son uno de sus síntomas.
Tener un grano ocasional no significa necesariamente que tengas acné. Pero si los brotes son frecuentes, con muchos granos, puntos negros, puntos blancos y piel grasa, entonces probablemente sí estás lidiando con algún tipo de acné.
¿Puedes tener granos sin tener acné?
Sí, es posible. Los granos ocasionales pueden aparecer por:
- Cambios hormonales (como durante el ciclo menstrual)
- Estrés
- Reacción a productos cosméticos o de cuidado de la piel
- Mala higiene o tocarse la cara con frecuencia
(Consulta consejos de higiene aquí y aquí)
Reflexión final
Comprender la diferencia entre acné y granos puede ayudarte a elegir el tratamiento adecuado. Si enfrentas brotes constantes, puede ser útil consultar a un dermatólogo para recibir orientación profesional.
En resumen:
- Los granos son temporales y pueden aparecer de manera aislada.
- El acné es una condición más persistente que puede manifestarse de varias formas.